Mr Bojangles

O el Cool Hand Luke en fase crepuscular…


Hay can­cio­nes muy pecu­lia­res… can­cio­nes que sin saber muy bien por qué —a prio­ri— aca­ban sien­do ver­sio­na­das infi­ni­dad de veces. Está cla­ro que si eso suce­de es por­que la can­ción mala no debe ser… pero hay algo más… no es solo la can­ción en sí, hay que tener en cuen­ta tam­bién la his­to­ria que va detrás de la letra... segu­ro que detrás hay algo intere­san­te. Segu­ro. Lue­go, sin saber muy bien por qué, esas mis­mas can­cio­nes atraen como ima­nes… inclu­so en sus suce­dá­neos versionados.

Es curio­so como no siem­pre las ver­sio­nes siguen una jerar­quía… hay ver­sio­nes que, sien­do gene­ro­sos, aca­ban superan­do a las ori­gi­na­les… y eso que no serían lo que son si no par­tie­sen de una bue­na base —a fin de cuen­tas, el que ver­sio­na, lo hace por­que tie­ne un míni­mo de inte­rés y admi­ra­ción por la can­ción de la que par­te—. Hay tipos que sin haber par­ti­ci­pa­do en la com­po­si­ción ori­gi­nal aca­ban con­vir­tien­do su ver­sión en algo gran­de. Pero esto es algo que mere­ce­ría un post espe­cí­fi­co más ade­lan­te… algo sobre ver­sio­nes… todo un mundo.

Pero hoy la cosa va de Mr. Bojan­gles… qué can­ción. Hace unos días la escu­ché en la ver­sión de Nina Simo­ne… huel­ga decir que sal­van­do la admi­ra­ción que ya pro­fe­so por Simo­ne, la can­ción atra­pa des­de el pri­mer ins­tan­te. La ver­sión ori­gi­nal es de Jerry Jeff Wal­ker

Y tie­ne su his­to­ria… claro.

Al pare­cer, el bueno de Jerry Jeff Wal­ker, sos­tie­ne que cono­ció a un tipo muy pecu­liar en la cár­cel… un tipo que se hacía lla­mar a sí mis­mo Mr. Bojan­gles para evi­tar que la poli­cía iden­ti­fi­ca­ra su ver­da­de­ra iden­ti­dad. Se hacía lla­mar así por­que por aquel enton­ces, había un actor y bai­la­rín de cla­qué muy cono­ci­do lla­ma­do Bill “Bojan­gles” Robin­son. Pero la can­ción nada tie­ne que ver con este his­trió­ni­co actor de raza negra. El Mr. Bojan­gles al que hace refe­ren­cia la can­ción era un indi­vi­duo de raza blan­ca de los bajos fon­dos de Nue­va Orleans. Dice Jerry Jeff Wal­ker que cuan­do pasó una tem­po­ra­da en la cár­cel —fue dete­ni­do por estar borra­cho en la calle— se topó con el tal Sr. Bojan­gles… un vaga­bun­do que había sido dete­ni­do como par­te de una reda­da tras un asesinato.

Ambos habla­ron de la vida jun­to a otros pre­sos pero, cuan­do el Sr. Bojan­gles rela­tó todo lo que había vivi­do jun­to a su perro duran­te quin­ce años, el ambien­te en la cel­da se vol­vió melan­có­li­co… Alguien sugi­rió que habría que ani­mar el asun­to y el pro­pio Sr. Bojan­gles delei­tó a los pre­sen­tes con un bai­le de claqué.

Así la can­ta­ba Nina Simo­ne… (esta can­ción ya la enla­za­mos en el post ante­rior).

 

Bojangles

Hay una ver­sión estu­pen­da en you­tu­be de un direc­to de Sammy Davis Jr. en Ale­ma­nia en 1985…

Y yo me pre­gun­to… ¿quién podría haber sido el tal Mr. Bojan­gles? Evi­den­te­men­te jamás des­cu­bri­ría seme­jan­te cosa ni fal­ta que hace… pero si alguien me pre­gun­ta­ra a quién me recuer­da el tal Mr. Bojan­gles o quién podría haber sido… res­pon­de­ría sin dudar… el tal Mr. Bojan­gles bien podría haber sido el famo­so Cool Hand Luke (La Leyen­da del Indo­ma­ble)… ya con unos años de más y down & out… en su fase cre­pus­cu­lar… ¿o no? Para quién haya vis­to la abso­lu­ta­men­te impres­cin­di­ble pelí­cu­la de Stuart Rosen­berg no habrá más que decir.

Cool Hand Luke —Paul New­man— es un tipo al que detie­nen por des­or­den públi­co y es encar­ce­la­do en una típi­ca cár­cel del sur de los Esta­dos Uni­dos. Un espí­ri­tu libre que se nie­ga a seguir pre­so y… y las mon­ta par­das vamos… no quie­ro estro­pear­le la pelí­cu­la a nadie, en caso de no haber­la vis­to —cra­so error!—. Con acto­res como Geor­ge Ken­nedy, Den­nis Hop­per o Harry Dean Stan­ton, entre otros… Una mara­vi­lla.

El caso es que Cool Hand Luke bien podría haber sido el tal Mr. Bojan­gles… solo que en tiem­pos, las aven­tu­ras las habría corri­do jun­to a su perro fiel. Con el paso de los años, ya vie­jo… habría cana­li­za­do sus ansias de liber­tad hacia el tap dan­ce… que habría dedi­ca­do a sus com­pa­ñe­ros de barra­cón para entre­te­ner­los una vez más… casi como en la pelí­cu­la. Des­de lue­go ambos per­so­na­jes se dan la mano… Cool Hand Luke no bai­la cla­qué pero se come 50 hue­vos duros para diver­ti­men­to del per­so­nal… casi nada.

Ambos per­so­na­jes, Cool Hand Luke y Mr. Bojan­gles, son repre­sen­ta­cio­nes de sen­ti­mien­tos y emo­cio­nes muy huma­nas cana­li­za­das a tra­vés de las artes… uno de los per­so­na­jes a tra­vés del Cine y el otro de la Músi­ca. ¿Qué es Cool Hand Luke sino un Antoi­ne Doi­nel adul­to —Los 400 Gol­pes de Fra­nçois Truf­faut—? Pues eso… Liber­tad. La rela­ción que tene­mos los huma­nos con la liber­tad… y no con la liber­tad en gené­ri­co… sino con sen­tir­nos ver­da­de­ra­men­te libres. Libres.

Y enton­ces cla­ro… ¿cómo no va a pro­vo­car, al menos, un esbo­zo de son­ri­sa escu­char Mr. Bojan­gles? Está cla­ro que no todos tene­mos por qué inte­rio­ri­zar este tipo de cosas pero… qué demo­nios… ¡allá cada cual!

Verano

O el Sum­mer Free Spi­rit Bird para los amigos

Con esta músi­ca comen­za­ban unos días de des­co­ne­xión… Cómo lo Oyes… de San­tia­go Alcan­da. Sona­ba Gerry Raf­ferty en radio 3 cuan­do cru­za­ba la fron­te­ra y salía de Espa­ña… poco a poco fui per­dien­do la señal de Radio Nacio­nal con esta can­ción pre­ci­sa­men­te… y, enton­ces, bucee de lleno en unos días de des­co­ne­xión total. Supon­go que a todos nos hace fal­ta de vez en cuando.

Gene­ral­men­te, des­pués de atra­ve­sar una fase de caren­cia —tan­to en lo emo­cio­nal, como en lo físi­co—, los estí­mu­los se per­ci­ben de otra mane­ra y se mag­ni­fi­can o, en ver­dad, se valo­ran... cosa que con fre­cuen­cia no hace­mos. Es muy com­ple­jo sin­te­ti­zar emo­cio­nes a tra­vés de un sim­ple tex­to... qui­zá sea inclu­so teme­ra­rio y pre­ten­cio­so. Pero el caso es que a la hora de regis­trar lo vivi­do, el tex­to es una de las for­mas para hacerlo.

No seré muy explí­ci­to en rela­ción a lo vivi­do... no es el momen­to ni el lugar... sin embar­go, sí resul­ta intere­san­te como un puña­do de can­cio­nes pue­den mar­car como un hie­rro can­den­te el lomo de nues­tra psi­que... y así que­da­rá mar­ca­do para los restos.

Las can­cio­nes iban sonan­do… como quien no quie­re la cosa… como las cer­ve­ci­tas que vas abrien­do, fres­cas y conciliadoras…

Reco­rrien­do el camino que me lle­va al lugar don­de he sido feliz duran­te años... jus­to al lado del mar y con una peren­to­ria nece­si­tad de des­co­nec­tar... se podía escu­char Músi­ca de todo tipo… de aque­lla que entra en el tué­tano y va dan­do un buen mar­co para des­co­nec­tar de ver­dad —o sea… Trio­lo­cría… para los que ya enten­dáis el con­cep­to de nues­tro proyecto—.

Es pro­ba­ble que más de uno expe­ri­men­te ese tor­be­llino emo­cio­nal que reco­rre el cuer­po al acer­car­se len­ta­men­te al lugar don­de habi­tan los bue­nos recuer­dos de infan­cia y ado­les­cen­cia... a la Never­land par­ti­cu­lar... al País de Nun­ca Jamás... Cada cual tie­ne el suyo... supon­go. Yo ten­go el mío... y esta vez esta­ba espe­cial­men­te «Never­land». Tan­to... que antes de mar­char­me aun estoy pen­san­do en vol­ver... ¿para siem­pre?... buf... qué com­ple­ja es la vida… hay raí­ces que te aga­rran y no te largan.

El tríp­ti­co de nues­tro dis­co de Trio­lo­cría, tan­to el plano cen­tral inte­rior como el exte­rior, está basa­do en ese Never­land par­ti­cu­lar... y, en esta oca­sión, ha teni­do ban­da sono­ra con­cre­ta... no la nues­tra de Trio­lo­cría, cla­ro... aun­que algu­na cayó. Se ha pro­du­ci­do ese suce­so curio­so de aso­cia­ción de Músi­ca y momen­tos vita­les... a par­tir de aho­ra, cada vez que escu­che estas can­cio­nes recor­da­ré estos mara­vi­llo­sos días de septiembre.

Escu­chan­do este tema de la Bom­bay Dub Orches­tra, sen­ta­do en el sue­lo are­no­so fren­te al mar… luna lle­na, el mar a cin­co metros y una moran­gos­ka en la mano; jue­go de luces endia­bla­do… velas en sacos de papel, ras­tros de un atar­de­cer roji­zo en el hori­zon­te de ponien­te, la luna orgu­llo­sa requie­re aten­ción en el plano ceni­tal… Pedras Ama­re­las delan­te y detrás de noso­tros y total­men­te solos fren­te a seme­jan­te espec­tácu­lo. Sum­mer Free Spi­rit Bird… Bue­na com­pa­ñía, pri­mos a los que quie­ro como a her­ma­nos y la nece­si­dad de des­co­ne­xión ver­da­de­ra­men­te en pro­ce­so de reso­lu­ción… des­co­nec­tan­do en cada segun­do, en cada ima­gen, en cada gol­pe de bri­sa mari­na. Hacía años que no me topa­ba con ese… «Sum­mer Free Spi­rit Bird»… esa dis­po­si­ción men­tal, esa vita­li­dad… ese dis­fru­te de la vida… así… direc­to y cla­ro, sin com­ple­jos ni sub­ter­fu­gios; lejos que­da la com­ple­ji­dad de la coti­dia­ni­dad en las gran­des ciu­da­des… de la socie­dad actual.

Un espí­ri­tu ino­cen­te cada vez que se reen­cuen­tra o des­en­vuel­ve… pero exis­te, y es más puro que muchos. Sor­pren­de en oca­sio­nes… pro­vo­ca recha­zo en otras… ¿pero qué sería de Never­land sin su Sum­mer Free Spi­rit Bird? Es algo casi inevitable.

Y ahí está…

De repen­te sin­to­ni­za esta can­ción… y des­en­ca­ja al menos pin­ta­do. Mr. Bojan­gles… mere­ce un post exclu­si­vo, que dejo para más ade­lan­te. Qué mara­vi­llas exis­ten por el mun­do. La pre­gun­ta es… ¿quién no baja las defen­sas escu­chan­do Mr. Bojan­gles?... solo aque­llos que olvi­da­ron sus Neverland’s par­ti­cu­la­res… Nina Simo­ne des­ar­ma a cual­quie­ra y, si enci­ma habla­mos de una can­ción tan bue­na como esta… ¡estás per­di­do! Y la ver­dad es que no sé por qué pero… yo, per­so­nal­men­te, ten­go ten­den­cia a des­ar­mar­me en sep­tiem­bre… cosas que pasan. Sep­tiem­bre es el mes.

Una ban­da sono­ra muy ecléc­ti­ca… pero está cla­ro que no le hace­mos ascos a nada…

Y cla­ro… lue­go hay can­cio­nes que pare­ce que están hechas deli­be­ra­da­men­te para el verano… temas elec­tró­ni­cos, sin tan­ta enjun­dia como los Mr. Bojan­gles y com­pa­ñía… pero que des­de lue­go ayu­dan a mover el esque­le­to o la men­te… según pre­fie­ra cada cual…

O esto otro por ejemplo…

Qué bue­nos días he pasa­do… he cono­ci­do gen­te nue­va estu­pen­da, me he diver­ti­do, bue­na músi­ca… fami­lia, ami­gos… un mar espec­ta­cu­lar, la piel fas­ti­dia­da por la expo­si­ción irres­pon­sa­ble al sol —mea cul­pa—… algún futu­ri­ble a la vis­ta… curio­sos días estos de sep­tiem­bre... que le qui­ten a uno lo bai­lao. We’ll see what hap­pen now...

No están todas las músi­cas… ni fal­ta que hace. Pero ahí que­da regis­tro de can­cio­nes idó­neas para mar­char­se y des­co­nec­tar… fun­cio­nan, doy fe. Es como todo… cada cual ten­drá sus gus­tos, qui­zá esto se ajus­te más a mis gus­tos… a fin de cuen­tas, me gus­ta de todo… pero… para gus­tos los colo­res, está cla­ro. Allá cada cual.