Cuando llego excesivamente tarde al curro (por mi culpa, por mi gran culpa) no me queda otro remedio que meterme en un taxi y correr como si no hubiese un mañana. Para colmo, hoy había convocada huelga de transportes en Madrid, el metro está cerrado.
Tocaba fichar en el curro a las 18:00. El taxista llevaba sintonizada Radio 3, cosa con la que no me suelo topar en un taxi, que yo recuerde al menos. Dado el horario, al parar en un semáforo no he podido evitar pensar… «Mira… en un momento empieza Alcanda con su programa»… imposible no acordarme, después del rato que pasamos con él y el directo que hicimos en el estudio.
Llegaba tarde… dio tiempo a escuchar la primera canción del programa en el último de los semáforos.
Al salir del curro el metro seguía cerrado, puesto que siguen con el paro convocado. Toca volver a patita a casa (una hora de caminata aproximadamente). Por el camino, me pongo los cascos y escucho el disco del amigo Manel… ya ha parido. Tengo pendiente un artículo en relación a Vientos de Esperanza, su nuevo disco.
A mitad de camino me da por escuchar algunos temas de Triolocría, nuestro disco, que llevo sin escuchar muchos meses. Muchos.
Al pasar por la glorieta de Cuatro Caminos empieza Sapos y Ranas… que continua hasta que llego a mi casa. No me quito los cascos, voy dejando la mochila, me quito la cazadora… pero me apetece escuchar la canción hasta el final…
Echo mano al móvil para ver si tenía mensajes (dejo el teléfono en casa, no lo llevo al trabajo) y tengo varios mensajes diciendo: «Santiago Alcanda te acaba de poner en Radio 3 Sapos y Ranas»… Y termina la canción en los cascos, con ese maravilloso acordeón de Rodri Pérez.
Esto acaba de suceder tal y como lo he escrito.
Minuto 15…
Si llego a ser aún más irresponsable de lo que ya soy, y hubiese llegado 15 minutos tarde al trabajo, habría escuchado nuestra canción en el taxi. Me habría quedado con la cara a cuadros. Pero si no era por el camino A, sería por el B… al final dio la tremenda casualidad de que entré en casa poco antes de las doce de la noche escuchando la misma canción que había sido emitida en nacional horas antes, sin tener ni idea de ello. Hacía muchos meses que no la escuchaba. En fin.
Pd.- Que te pinche Alcanda en su programa y que justo después pinche una versión de una de tus canciones favoritas de Crosby Stills and Nash… pues eso. Hay días que no entiendo nada, la realidad y sus cosas me supera.